
La historia de España está marcada por el fenómeno de la emigración. Esta emigración determinó la fragmentación del país y de su gente, dividiendo las familias, los afectos, los roles, las geografías, los hábitos y los entornos culturales.
Hoy nos enfrentamos con el hecho inverso que es el retorno. El retorno reclama a nivel social un reacomodamiento. La sociedad tiene que prepararse para incorporar y asumir el retorno de sus ciudadanos emigrados.
Desde el siglo XIX España emigra. Primero con rumbo a América, donde había trabajo, riqueza, territorios. Luego, en el siglo XX se dirige a los países industrializados de Europa, a donde aporta mano de obra poco cualificada para la industria y los servicios.
El gobierno del país fomentó la emigración hacia América a partir de 1853, y al final del siglo se habían ido medio millón de personas, cifra que en ese momento representaba el 20% de su población.
"Este vaise i aquel vaise,
e todos, todos se van,
Galicia, sin homes quedas
que te poidan traballar.
Tés, en cambio, orfos e orfas
Tés, en cambio, orfos e orfas
e campos de soledad,
e nais que non teñen fillos
e fillos que non tén pais.
E tés corazóns que sufren
longas ausencias mortás,
E tés corazóns que sufren
longas ausencias mortás,
viudas de vivos e mortos
que ninguén consolará".
(ROSALÍA DE CASTRO, "FOLLAS NOVAS", 1880)
La integración de los españoles fue buena, desarrollaron muchas iniciativas, y fuereconocida su laboriosidad. Crearon comercios, servicios y pequeñas industrias en los países en los que se establecieron, generalmente, de forma definitiva. Fundaron asimismo Sociedades de Socorro Mutuo que aún hoy perviven.
Como consecuencia de la Guerra Civil otro medio millón de personas salen del país. La corriente migratoria se reanuda a partir de 1940, y durante veinte años (hasta 1960) salen hacia América unos 32.000 ciudadanos al año, alcanzando una cifra superior a los 600.000.
Según los últimos datos del Censo Electoral de Españoles Residentes en el Extranjero (CERA) del 1 de Octubre de 2008, la población de españoles residentes en el exterior se sitúa en 1.233.568 personas. De las cuales, el 54,37% reside en Latinoamérica. Concretamente, en América Latina residen 670.633 españoles, concentrándose principalmente, en seis países: Argentina, Venezuela, Brasil, México, Uruguay y Cuba.
A partir de 1960 y hasta 1973, la emigración da un profundo giro, dirigiéndose entonces los españoles hacia los países europeos.
Como dato significativo hay que señalar que importantes ingresos económicos entraron a España durante esos años procedentes del ahorro de sus emigrantes, cifra que superó la correspondiente a la exportación del país.
Como dato significativo hay que señalar que importantes ingresos económicos entraron a España durante esos años procedentes del ahorro de sus emigrantes, cifra que superó la correspondiente a la exportación del país.
Ref. bibliog. en Google Search.
Fotos de Manuel Ferrol, "el fotógrafo de la emigración"